ENERGÍA HIDROELÉCTRICA EN ESPAÑA
El papel determinante de Iberdrola España en el desarrollo y la producción de energía hidroeléctrica en el país
En Iberdrola España llevamos desde nuestros orígenes apostando por la energía hidroeléctrica en España como clave para un futuro energético más sostenible y seguro. Con más de 120 centrales hidroeléctricas en funcionamiento y casi 10.823 MW de potencia instalada, abastecemos de energía hidroeléctrica limpia y renovable a unos 7,6 millones de hogares en el país gracias a esta tecnología.
Presa de Aldeadávila, situada en el río Duero, en Salamanca, en la frontera entre España y Portugal.
Las centrales hidroeléctricas aprovechan la energía cinética y potencial de los saltos de agua a lo largo de un río para convertirla en energía eléctrica renovable, de forma limpia y sin generar residuos, a través de infraestructuras hidroeléctricas capaces de extraer el máximo potencial de este recurso autóctono. Así, la producción de energía hidroeléctrica en los cauces fluviales constituye un valor añadido al valor intrínseco del agua que se consume para el abastecimiento humano, el campo y las ciudades.
En Iberdrola España llevamos desde nuestros orígenes apostando por la energía hidroeléctrica como clave para un futuro más verde y siendo un referente de esta tecnología; en línea con la apuesta del Grupo Iberdrola a nivel internacional, con más de 13.000 MW de potencia hidroeléctrica instalada en todo el mundo.
Beneficios de la energía hidroeléctrica en España
La energía hidroeléctrica ha sido un pilar clave en España para la transición hacia un sistema energético más sostenible y resiliente. Ha contribuido a la diversificación de la matriz energética, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero.
Algunos de los principales beneficios de la energía hidroeléctrica en España:
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Proporciona una fuente constante y predecible de energía, lo que fortalece la seguridad del suministro eléctrico y ayuda a estabilizar los precios en el mercado energético.
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Los sistemas hidroeléctricos son flexibles, de forma que permiten una respuesta rápida a las variaciones de demanda.
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Permite el almacenamiento de energía a gran escala gracias a las centrales de bombeo.
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La inversión económica inicial es intensiva y los costes de explotación reducidos.
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Las centrales hidroeléctricas son instalaciones duraderas y garantizan una larga vida útil.
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La construcción de los embalses y presas para el funcionamiento de las centrales genera oportunidades para el desarrollo de turismo, recreación y actividades acuáticas, potenciando el sector económico en las regiones cercanas.
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Promueve la generación del empleo verde en las zonas donde se ubican instalaciones.
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Complemento a otros tipos de energía. Es un respaldo esencial para el desarrollo de otras tecnologías renovables como la solar y la eólica.
La historia de Iberdrola en España y la de la generación de energía hidroeléctrica en el país van en gran medida de la mano. En España empezó a producirse energía hidroeléctrica a pequeña escala en el siglo XIX, pero no fue hasta la primera mitad del siglo XX cuando se expandió, impulsada por la industrialización y la creciente demanda eléctrica. Hidroeléctrica Ibérica, que pasaría a formar parte de lo que hoy es Iberdrola España, nace en 1901 en un momento de máxima necesidad de suministro de energía, impulsada por la visión de futuro de sus fundadores y su compromiso social, emprendiendo un camino pionero en el sector de la energía renovable en España.
A lo largo de las décadas y ya entrado el S. XXI, España continúa apostando por su capacidad hidroeléctrica, incorporando tecnologías más eficientes y sostenibles, e Iberdrola España sigue anticipándose a los retos y jugando un rol fundamental en la modernización de este tipo de central, esencial para la transición energética.
¿Cómo controlamos el funcionamiento de nuestras centrales hidroeléctricas?
Hace dos décadas, Iberdrola España inauguró un proyecto pionero a escala global en el sector de las energías renovables: el Centro de Operación de Renovables (CORE) de Toledo. Este centro controla y opera en tiempo real el funcionamiento de las instalaciones eólicas, fotovoltaicas e hidroeléctricas de Iberdrola España.
En la actualidad, el centro gestiona, desde su sede en Toledo, más de 300 instalaciones de parques eólicos, plantas fotovoltaicas, subestaciones eléctricas y baterías ubicadas en 11 países distintos. Además, el CORE supervisa más de 3 millones de datos en tiempo real y controla más de 13 GW de potencia activa.
Plantas hidroeléctricas en España
Desde Iberdrola España gestionamos, en coordinación con las administraciones competentes y de acuerdo a las distintas leyes, más de 130 centrales de generación en la península ibérica, entre hidroeléctrica y minihidroeléctrica, alcanzando una potencia instalada total de 10.698 MW. Esta producción es susceptible de beneficiar a casi 7,6 millones de hogares en el país, con un suministro eléctrico renovable, sostenible y barato. A esto se suma la capacidad de almacenamiento energético gracias a las plantas hidroeléctricas de bombeo, convirtiéndola en una tecnología de gran impacto.
Iberdrola España es un actor destacado en la producción hidroeléctrica en España y cuenta hoy con algunas de las centrales hidroeléctricas con mayor potencia instalada del país, como son la de Cortes-La Muela en el Júcar (Valencia), la de Aldeadávila en el Duero (Salamanca), la de José María de Oriol (Alcántara) en el Tajo (Cáceres), la de Villarino en el Tormes (Salamanca) y la de Saucelle en el Duero (Salamanca).
A continuación, puede encontrarse más información de cada una de nuestras plantas hidroeléctricas, divididas según las cuencas hidrográficas en las que están presentes y de las que se nutren.
NUESTRAS CENTRALES EN LA CUENCA DEL JÚCAR
NUESTRAS CENTRALES EN LA CUENCA NORTE
NUESTRAS CENTRALES EN LA CUENCA DEL SEGURA
NUESTRAS CENTRALES EN LA CUENCA DEL SIL
NUESTRAS CENTRALES EN LA CUENCA DEL TAJO
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